Candados de palabras

He decidido escribir frases que van dirigidas a diferentes personas. No voy a poner nombres y tampoco aceptaré que se diga esa es para él o aquella es para ella. Podeis hacerlo en vuestros blogs si me leeis porque creo que podría ser interesante. A veces las palabras son difíciles de pronunciar cuando cortan tus labios al pasar y sólo logras gesticular letras ensangrentadas que no harán más que daño. Y otras veces temes hablar y que tus palabras atormenten o acosen a tu receptor. Hay veces que no somos capaces de decir las palabras más sinceras... y otras veces el qué dirán o cómo lo interpretarán juega un papel importante. Ahí van mis palabras:

Te echo de menos. No te enfades conmigo. Me gustaría volver a abrazarte. Sabes que tengo la manía de disculparme por todo, pero sabes que siempre cometo los mismos fallos tontos. Perdóname. Te quiero.

No creas que me olvido de ti. El hecho de verte menos no significa que me importes menos. Sigues siendo la persona que mejor me escucha en el mundo. Somos amigos, lo sé, y sé lo unidos que estamos.

A pesar de que te ponga de los nervios, sé todo lo que me quieres. No me robarán de tu lado. Te quiero, peque.

Aunque ya no hablemos, a veces te echo en falta. Estoy segura de que he cometido muchos errores, pero no puedo arreglarlos. Lo siento por todo el daño que te hice, lo siento por todo el daño que he dejado en tus recuerdos, lo siento por no captar los detalles... Me alegro mucho de cómo te van las cosas ahora. Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento... ya nunca se arreglará. Es un tema demasiado delicado.

No entiendo qué pasa por tu cabeza y no entiendo lo que pasa por la mía. No sé si darle tiempo al tiempo. Sólo tengo miedo a herirte aunque no sea nada tuyo. Espero que seamos grandes amigos... te he cogido muchísimo cariño. Te quiero mucho.

¿Qué pasará en el futuro? Sólo espero que sigamos igual de bien y que con el tiempo seamos muy "hermanitos". Te quiero mucho.

Ya no sé como explicar lo que siento por ti, si es una obsesión o simplemente por ser quien me sacó de mis complejos de dama de hielo te quiera más de lo normal. He necesitado meses para lograr ser alguien de confianza y necesitaré años para ser tu amiga, pero lo conseguiré.

Gracias por confiar en mí apesar de ser tan pequeña y tan diferente.

Y a ti, Shaisha... pensamos demasiado, deberíamos ser más simples. No puedo dejar de hablarte pero a la vez quisiera dejar de hacerlo para no complicarlo todo tanto. Pero entonces pienso que no es culpa de nuestras conversaciones, sino de mi mente impaciente. Buenas noches.