18 junio 2008

Tanto odio

Tantas cosas que decirte, que no sé como empezar... que te quiero, que te odio, que sin ti no puedo estar.

Y así comenzaba una canción, que en este caso no refiero a un amante, sino a mi circunstancia (aludiendo a Ortega y Gasset). Y es que querer vivir mi vida y aborrecerla con todas mis fuerzas, a su vez, es muy cansado. Pero, probablemente no sea ni eso, porque lo que quiero es querer vivir con ganas, siendo éste un querer y no poder. No hay más, porque
sin vivir no puedo estar.

Son tantas las cosas que quiero decir y son tantos los días que llevo queriendo escribir... quiero hablar de qué simboliza el dinero para mí, quiero dibujar a mi familia en palabras, quiero expresar el vacío que encuentro en mí misma, quiero odiaros a todos y que signifiquéis algo en realidad y quiero odiar por escrito a los que han borrado mi plan de futuro, hundiéndome en la nada que menos me hacía falta. Y no quiero mierdas de consejos que no hacen más que sonar a tópico. Porque no me gusta auto compadecerme y prefiero que seáis vosotros los que me digáis:
"Pobrecita".
Porque siento pura aversión, odio. Las personas me vacían, me entristecen, me intranquilizan. Los sitios me inquietan, me incomodan, me producen inseguridad. No siento intensidad en mis emociones. No me divierto, ni encuentro calor en las sonrisas, en las palabras de ánimo. Ya son más de 5 meses de ya se pasará, y estoy realmente cansada. Sobre todo ahora que se ha acabado todo. Ahora que ya me ha rematado el karma.
¿Quién me ha querido quitar todo? ¿No basta con todo lo que doy? ¿No es suficiente esfuerzo, no soy suficiente? Me siento machacada. Y como digo o trato de decir, no es un montón de problemas familiares, conyugales y chorrimingales, sino una terrible época mental.
En fin, ya hablaré de lo mencionado. Ya todo da igual, de todos modos...
Y ni me despido, Shaisha.