Boom

Explotan los sentimientos que un día anudaste creando un ovillo. Cuándo los hilos no dan más de sí y no puedes retener las palabras. Cuándo los sentidos ansían llegar más y más lejos. Cuándo la ilusión quiere ser realidad y los sueños se convierten en deseos. Cuándo lloras de tristeza o de alegría. Estallas en una gran diversidad de emociones. Cuándo sientes que no puedes ir más lejos, estiras el brazo y rompes tus esquemas. Quieres y puedes.
Cuánta gente perderé de mi lado, por no corresponder en la misma medida. Cuánta gente querrá alejarse lo más rápido posible, por huir del encanto de mis palabras. Cuántas personas dejarán huella en mis sentimientos, pero borrarán mis huellas de los suyos... cuántas...
Cuántas veces tendré que convencerme de que no he sido yo. Cuántas veces quedé y quedaré vedada de palabra. Cuántas despedidas tendré que soportar. Cuántas decepciones creeré dar, cuándo sólo son sentimientos irreales de los que mi mente me convence. Cuántas veces lloraré hasta que por fin un día no sea la tristeza la culpable, sino tus manos que han sabido encontrarme...

Y qué más da...

Apoyo mi codo en la mesa y pongo sobre mi mano mi cabeza. La frente queda bajo presión y los dedos se entrelazan con los mechones de pelo de mi flequillo. Cierro los ojos, mis pensamientos ladean mi cabeza. La jaqueca, ayuda al mareo a empujarme a morderme los labios. Arrugo mi nariz, cojo aire. Duele. Debería dormir mejor. Y cerrar con llave la cocina, porque ya no sólo como fruta suelta, sino pan y chaca también. Y lo que pillo. Me duele mucho la cabeza. Tal vez debería irme a dormir ya. Pero me cuesta tanto... De todas formas, no sirve para nada lamentarme, cada uno tiene sus problemas y mucho peores. Y que me queje yo, tiene delito. Aunque la tristeza, se ha convertido en una epidemia, y todo el mundo a quedado decepcionado, frustrado, maltratado, arruinado o simplemente triste. Así que si todos están mal, no me voy a quejar. Aunque me duela la cabeza. Me he de ir, ya escribo cuando se me pase. Buenas noches, Shaisha.

Pensamientos en alto

Me gustaría oír tus pensamientos en alto, sentir tus sentimientos, ver si lo que intentas decirme en silencio, es lo que en verdad dicen tus palabras, o sólo son tus manos, tus gestos, que juegan con mi inseguridad, en un intento en vano de ahogar esta soledad.
No es reciente la verdad, pero quería ponerlo. Podría poner otros tantos textos de hace tiempo, pero, creo que el presente es más importante. Se avecinan unas semanas duras respecto a los estudios y por lo tanto van a ser muy cansadas. Debo centrarme en comer algo mejor y hacer más caso a mis estudios. También he de prepararme para los mil metros durante un ratito luego, porque antes solo de subir andando 4 pisos con la mochila puesta ya me caía rendida(aunque he subido los 8 pisos). Me temo que volveré a acabar mal, pero por no ser pesimista intentaré que me salga lo mejor posible, aunque duela, porque yo siempre digo: "Son sólo unos minutos. Largos, duros, difíciles y dolorosos. Puede que acabes llorando, pero te reconfortará el haber llegado y no te habrás arrepentido de haberlo hecho". Por mi cumpleaños me felicitó muchísima gente(más que nada porque lo pregoné por todos los sitios que pude) y quería darles las gracias a todos aquellos. También agradecer a la gente que me ha regalado algo, aunque sea su cariño y comprensión, porque estos días me he sentido muy querida. Un besazo. Buenas tardes, Shaisha.

"Tu y Yo" somos "Nosotros"

Caminamos por este largo camino, tú y yo, juntos... despacio, no hay prisa, el cielo nos esperará por siempre. Seguimos andando, ya habrá un final, eso no es lo que nos preocupa. Si vamos los dos lo demás da igual. Disfrutaremos del camino porque tú y yo somos nosotros. Porque nosotros nos complementamos... y la soledad ya no existirá aún siendo una sola: mi alma y la tuya.

Despiertas y como una bailarina te estiras. Princesa de las almohadas, sales de entre tus cojines y despliegas tus alas. Bostezas, miras atrás. Abres la ventana y te giras para respirar el aire de tu reino. Sonríes a la mañana y ella te devuelve un rayo de sol que baña tu cama. Suspiras y una brisa despierta tus sentidos. Tus ojos miran entreabiertos el barullo casi insonoro de los árboles en el jardín. Te sientas sobre tus piernas, te echas en la cama de nuevo, pero ahora en sentido inverso. Sacas un pie, otro. Sujetas tu camisón y de una voltereta estás de pie ante tus sabanas. Tus obras colgadas de la pared llenan de color la estancia y cojes de tu mesilla tus gafas. El olor de el desayuno endulza el ambiente y abriendo la puerta te diriges a comenzar el día.

¿Soy la única o también os habeís imaginado la habitación en tonos rosas? Me apetecía escribir y eso es lo que me ha salido. El viernes es mi cumple(ya se que me repito), espero felicitaciones :P. Buenas tardes, Shaisha.

Desafíame

Desafíame a creer en lo imposible, a atreverme y no callarme, a lanzarme... y empezar a volar.
Rétame a caer en la trampa, a intentarlo y fallar, a vencerte en tu propio juego.
Sorpréndeme con un nuevo sentimiento, con una nueva visión, con una decepción...
Y luego dame una satisfacción, el calor de la victoria, el orgullo del triunfo.
Pero... si me cuesta arriesgarme, aceptar tu desafío y sorprenderme... nunca triunfaré... nunca me alegraré por mis actos... me desilusiono, me arrepiento.
Navego esperando encontrar la orilla, pero al ver las playas me parece demasiado fácil y huyo en busca de un acantilado... la opción más difícil a veces atrae más por tener algo por lo que luchar.
Estoy cansada, tengo agujetas, jaqueca permanente y miedo (cómo no) a mi cumpleaños... y si le temo ahora no se cómo será a los 40...
No sé que más decir, ya hablaremos Shaisha. Buenas noches.

The faithful Alice

He probado a buscar en google mi blog poniendo "The faithful Alice"y (varios enlaces después) aparecía, pero detrás le seguía un link a un blog de una chica que al parecer se dedicaba a buscar en blogger las palabras "trauma" y "Alice", por lo que aparece un cacho de mi blog en él *_*.
En fin. Hoy he decidido que hay que cambiar un poco las cosas en cuanto a mi alimentación y que debo dejar ciertos vicios. Por lo que mi meta para esta temporada será adelgazar un poco, y no es por algo psicológico sino porque he engordado 5 kg en menos de 8 meses, sin crecer ni un cm durante ese tiempo. También quiero que Shaisha siga ahí conmigo, me ayude en mis malos momentos y también que me escuche en mis mejores momentos. Pero sobretodo quiero encontrarme mejor con mi personalidad pues me he dado cuenta que me someto a demasiada presión y a veces ser tan buena no es bueno. Y si siento algo no debo reprimirlo, como hago siempre. Quedan 9 días para mi cumpleaños y quiero que sea una edad que vaya a recordar por mucho tiempo. Quiero dar las gracias desde aquí a todos vosotros que me leeís y a los que han empezado a leerme ahora. Y añadir a todo esto, que si a alguien se le ha ocurrido hecharle un vistazo al Blog en su totalidad se habrá sorprendido de la evolución que ha habido y que se preparen para la que vendrá en un futuro. Y una recomendación: leer la primera entrada del Blog y compararla con cualquiera de este mismo mes, no tiene desperdicio =D.

1año

Cumple un año el blog y con este aniversario posteo un dibujito dedicado a él.

Y bueno, mañana escribo que es tarde, un besito.

Carta a Ali

Querida Ali:
Llevas unos meses de inestabilidad emocional que se me han echo muy largos. Cada vez que pienso en tus decaídas, decaigo yo también por unos instantes. Siento que una barrera esta rodeándonos y que nos quedaremos solas. Dama del hielo... tu que eres capaz de calentar el corazón de los demás, pero incapaz de calentar el tuyo propio. Tu incapaz de amar pero muy capaz de enamorar. Quizás debas arriesgarte... pero siendo como eres, que solo das pasos en firme y seguro... no es fácil. Supongo que ningún cambio lo es. A veces hay que tomar decisiones... pero tú, indecisa, te quejas por lo que te rodea evitando responder a preguntas comprometidas. Ya va siendo hora de qué te esmeres en cambiar... o que alguien insista en tí hasta hacerte efecto. Pero con el poco entusiasmo que le pones, nadie insiste. Es lo que pasa por ocultar sentimientos...
De tu alma y compañera, Shaisha.

Con la boca llena...

...de palabras hirientes, de palabras sin sentido, de palabras que no me atrevo a decir, de palabras que quiero escribir. Con el estómago a rebosar... de nervios revoltosos, de amor juguetón, de angustia y de dolor. Con la cabeza repleta... de pájaros locos, de sentimientos danzantes, de esperanza y desidia, de miedo. Mucho miedo.

Estás tumbado en la hierba con tus labios rozando una flor. Huele a tierra húmeda y aire frío y puro. Respiras hondo y abres los ojos. El sol te da por la espalda y empiezas a notar el calor del mediodía. No sabes por qué, pero has dormido a la intemperie y tus pies descalzos apenas los sientes, mojados por el rocío. Apoyas la rodilla en el suelo, debilitado por la olvidada noche y ante ti se levanta una inmensa mansión parecida a un castillo. Colocas tu daga en el cinturón y avanzas dos pasos. Te detienes por la impresión del enorme edificio. No tienes nada que temer, eres el más ágil de tu especie. Más fuerte y rápido que ellos y sabes que una mansión no puede asustarte. Entras y dos ángeles petrificados te dan la bienvenida, agachados hacia ti. A los lados de la entrada principal escaleras pegadas a paredes llenas de retratos borrados. Más arriba cristales rotos y una especie de cúpula, con una puerta que da a ninguna parte frente ala vitrina que dibuja, gracias al sol, un entierro en el suelo, a tus pies. Caminas despacio, sigiloso. Te diriges a la sala que hay frente a ti, bajo las escaleras. Las cortinas granates dan un aspecto diabólico ala mesa que reina el centro de la habitación. Enciendes dos velas y te acercas a la chimenea. El momento se te hace extrañamente familiar y cierras los ojos para guardar su esencia y recordar. Al abrir los ojos tu cabeza se ha levantado hacia el cuadro de una especie de nigromante enmascarado empuñando una guadaña decorada por cráneos asemejando la muerte. En el suelo sangre y tras él, los ojos de un lobo. No sientes nada en él. Sólo un vacío. Te das la vuelta y te encaminas hacia las escaleras al 2º piso. Una cortina sustituye lo que algún día fue puerta en aquella entrada. Una dama vestida de blanco tumbada en un altar provoca que con una mano agarres tu pecho y con la otra agarres la pared polvorienta. Caminas a duras penas al reconocer a tu amada. Sientes como si una espada hubiese atravesado tu alma... pero no es tu alma la atravesada, sino la suya. Un rayo de luz indescriptible la hiere y sólo queda sitio para el dolor y la desconfianza. Vuelves sobre tus pasos, dolido, descubriendo unas escaleras a tu izquierda que parecen subir a un desván. Subes, en busca de la soledad. Al introducirte en las tinieblas de la estancia chocas con una cuna y un grito desgarrador abre la puerta que no da a ninguna parte, por la que se ve la cristalera que ahoga tu grito por el pánico que invade tu cuerpo ahora. Eres tú. Eres el enterrador y ella es la dama. La dama que agoniza en tus brazos. Gritaste al darte cuenta de que despertaste sin recordar nada. Gritaste al darte cuenta de que fuiste tú. Revives los ojos hundidos en lágrimas de tu dama que se asemejaban a los de un lobo. Lloras aterrado. No era la mansión a la que tenías que temer, sino a ti mismo. Eres tú, la mismísima muerte. Ahora acudes al cementerio a velar de todos aquellos que te hicieron fuerte y a llorar su pérdida. Maldices tu destino cada día y pides al cielo derrumbarse. Sobre la tumba de tu difunta amante duermes, a la espera de una nueva llamada.